Waxtard® vs. Mortero Tradicional: ¿Por qué la tecnología supera a la tradición?
- Productos S-35®
- 1 may
- 3 Min. de lectura
En muchas obras de construcción, todavía se recurre al clásico método de preparar estuco con mortero y arena, una práctica común por costumbre, pero que representa más desventajas que beneficios cuando se busca eficiencia, calidad y durabilidad. Hoy, el mercado exige soluciones profesionales y prácticas como Waxtard® Estuco Premium, desarrollado por Productos S-35 para transformar la forma en que se trabaja en obra.
En esta comparativa te mostramos por qué Waxtard® es la mejor elección frente al sistema tradicional de mezcla arena-cemento.
1. Calidad de producto: estandarización vs. improvisación
Uno de los principales problemas del sistema tradicional es la variabilidad. La calidad del estuco depende del tipo de arena, del cemento disponible y de la proporción que el maestro de obra calcule “a ojo”. Esto puede generar:
Inconsistencias en color, textura y resistencia.
Mezclas mal proporcionadas que fisuran o se desprenden.
Acabados desiguales y difíciles de afinar.
En cambio, Waxtard® es una mezcla profesional preformulada en laboratorio, con materias primas seleccionadas, polímeros, aditivos y una curva granulométrica controlada. Cada saco tiene la misma calidad, sin depender del operador, del clima ni del proveedor de materiales.
🔬 Resultado: acabados más uniformes, duraderos y estéticamente superiores.
2. Tecnología que reduce retrabajos
En una mezcla tradicional, es común que después de aplicar el estuco, se requiera afinar, lijar o incluso reponer partes que se agrietaron al secarse. Esto genera más tiempo, más mano de obra y más desperdicio.
Waxtard®, al tener una formulación estabilizada, minimiza la contracción, mejora la adherencia y no requiere capas adicionales para dejar una superficie lista para sellar o pintar. Su tecnología permite aplicarse directamente sobre zarpeo o superficies compatibles, incluso en condiciones desafiantes de humedad o temperatura.
⚙️ Resultado: menos errores, menos retrabajos y más avance por jornada.
3. Tiempo de preparación y limpieza de obra
Una de las diferencias más notables entre el sistema tradicional y Waxtard® es el tiempo que se pierde antes y después de aplicar el estuco.
Con el método arena-mortero:
Se necesita cernir la arena, una tarea laboriosa que implica polvo, desperdicio y tiempo.
Hay que calcular proporciones, mezclar en grandes cantidades y coordinar su uso antes de que fragüe.
Se requiere el uso de mezcladoras, carretillas y botes, lo que ensucia la obra y ocupa espacio.
Al terminar, es obligatorio limpiar todo el equipo, lo que retrasa el cierre del día.
En cambio, con Waxtard®:
Solo necesitas agregar agua y batir en cubeta, sin cernir ni hacer mezclas complejas.
Preparas justo lo necesario para el día, evitando desperdicio.
No se requieren máquinas pesadas ni acarreos extensos.
La limpieza es mínima: un batidor y una cubeta son suficientes.
Este cambio puede representar hasta un 40% menos de tiempo en tareas de preparación y limpieza, lo que libera recursos para enfocarse en lo que realmente importa: avanzar en la obra con calidad y rapidez.
4. Menor impacto ambiental y logístico
Además de sus ventajas en calidad y tiempo, Waxtard® ofrece una logística más limpia y ordenada:
No hay acopios de arena ni polvo en obra.
No se desperdician toneladas de materiales sobrantes.
Se reducen los viajes de acarreo y la limpieza final.
Esto es clave para proyectos residenciales premium, hoteles, clínicas, oficinas y cualquier entorno donde la limpieza y el orden son parte de la experiencia del cliente.
🌱 Resultado: menos residuos, menos polvo y una obra más profesional.
Conclusión: evolución necesaria
Mientras que el método tradicional de mortero y arena puede parecer “más barato” a simple vista, en la práctica implica más riesgos, más trabajo y resultados menos confiables. En cambio, Waxtard® representa una evolución lógica y profesional, pensada para quienes valoran la calidad, la eficiencia y la durabilidad.
Comments